- Las cosas se llaman equívocas cuando tan sólo tienen de común el nombre.
- La belleza del hombre está o en la sonoridad, o en el significado.
- El alma es aquello por lo que vivimos, sentimos y pensamos.
- El cuerpo es el instrumento del alma.
- El imitar es connatural al hombre.
- La psicología fenomenológica debe su nombre a los 'fenómenos', de cuyo aspecto psicológico se ocupa.
- Sólo la fenomenología disipa la ilusión que nos impulsa a convertir lo lógico objetivo en psicológico.
- La razón y la ley son sinónimos.
- La vida primaria de la memoria es emotiva más bien que intelectual y práctica.
- Nosotros recordamos, naturalmente, lo que nos interesa y porque nos interesa.
- Lo que ocurre en el pasado vuelve a ser vivido en la memoria.
- La generalización de su objeto es la esencia misma de todas las ciencias.
- Todos somos fragmentos no sólo del hombre en general, sino de nosotros mismos.
- En la naturaleza las cosas están mucho más separadas que las almas.
- Toda actividad humana transcurre dentro de la sociedad, sin que pueda nadie sustraerse a su influjo.
- Toda existencia individual está determinada por innumerables influencias del ambiente humano.
- El pensamiento filosófico objetiva lo personal y personaliza lo objetivo.
- Lo que la filosofía es, sólo con sus conceptos y medios puede ser realmente determinado.
- Todos son locos, pero el que analiza su locura, es llamado filósofo.
- El primer paso hacia la filosofía es la incredulidad.